Los factores que contribuyen a la irritación incluyen:
Las propiedades químicas de la sustancia (por ejemplo, si es un ácido, un álcali o una sal)
La cantidad y concentración de sustancias químicas que entran en contacto con la piel, el tiempo y la frecuencia de la exposición.
También son importantes los factores peculiares de los trabajadores. Los factores hereditarios influyen en la variedad de reacciones observadas en diferentes personas cuando se exponen al mismo irritante.
La parte del cuerpo que entra en contacto con una sustancia irritante es otro factor a recordar. La penetración de sustancias varía en diferentes regiones del cuerpo. Por ejemplo, algunas sustancias penetran la cara y la parte superior de la espalda más rápidamente que los brazos.
Los factores ambientales desempeñan un papel importante. Por ejemplo, los lugares de trabajo caliente y húmedo hacen sudar a los trabajadores. El sudor puede disolver algunos tipos de polvos químicos industriales que pueden entrar en contacto con la piel. Esto aumenta sus efectos tóxicos o irritantes de los productos químicos porque las soluciones entran en la piel más fácilmente que los sólidos.
Por otro lado, la sudoración también puede tener una función protectora porque puede diluir o eliminar sustancias. Trabajar donde la humedad del aire es baja o donde la sudoración es prolongada, puede provocar quemaduras en la piel que, a su vez, pueden aumentar la posibilidad de irritación, el mejor ambiente es donde la piel este humeda en pero no al grado de producir grandes cantidades de sudor.
La fricción contra la piel, que ocurre durante el funcionamiento de las máquinas de rectificar y otros equipos puede rasparla, reduciendo su acción protectora contra los irritantes. La ropa empapada con irritantes es otro factor importante. Los cortes o lesiones de la piel permiten que las sustancias irritantes penetren más fácilmente en la piel.
Como recomendaciones se puede utilizar guantes para el tipo de trabajo que se va a realizar, camisa de manga larga, ropa a decuada y el EPP apropiado para la actividad.
Fuente: Centro Canadiense de Salud y Seguridad Ocupacional (CCOHS) www.ccohs.ca